Con el comienzo del verano y el inicio de los días largos y soleados nos vienen pensamientos sobre el mar, los grandes cielos azules y los sonidos, olores e impresiones sensoriales del océano. Es el despertar del espíritu, una época del año en la que muchos viajan a través del continente para sentir el sol en su piel y los que tenemos la suerte de vivir aquí disfrutamos de la libertad de un estilo de vida al aire libre.
Afortunados de tener una bella franja de playas de arena a las puertas de Sotogrande, nos dirigimos al borde del mar, a los clubes de playa, al soleado puerto deportivo y otras actividades al aire libre, pero tarde o temprano el atractivo del paraíso de los surfistas de la zona también resultará demasiado fuerte para resistirse. De hecho, Tarifa, a un poco más de media hora de Sotogrande, es uno de los principales centros internacionales de surf y kite-surf, aunque muchos vienen aquí simplemente para disfrutar del sol y del ambiente que impregna sus playas y su pintoresco casco antiguo.
Situada justo después de Algeciras, casi en el punto donde el Atlántico se funde con el Mediterráneo, este lugar que en su día era un tranquilo pueblo de pescadores se ha convertido en un popular punto turístico con su propio ambiente relajado de surf. Es una atmósfera que se respira incluso en el bonito centro histórico con sus fantásticos restaurantes, locales nocturnos y modernos hoteles boutique, pero si vamos a la parte nueva, justo al oeste del centro, allí las calles están llenas de tiendas con fachadas de brillantes colores y diseños icónicos pintados a mano.
Este maravilloso punto en la costa gaditana ofrece tiendas para surfistas, restaurantes vegetarianos y pastelerías así como tiendas con moda típica de Tarifa que tienen su propia marca de ropa de verano. Muchas de estas marcas de moda han surgido a nivel local y han llegado a convertirse en un fenómeno internacional que puede verse en las playas de España, Brasil, Italia e incluso Australia. Sede de espíritus afines de toda España, Europa y más allá, las bellas playas doradas de Tarifa y las fantásticas vistas a Marruecos a través de las aguas azules cristalinas también atraen a un tipo especial de turistas.
A los surfistas , «hipsters», turistas de alto poder adquisitivo e incluso personajes famosos que frecuentan sus playas y zonas de kite-surf les gusta pasar los días en los tranquilos hoteles de poca altura que bordean las playas y las noches en los fabulosos clubes de playa con bares al aire libre donde la atmósfera es tan relajada como la música ambiental. Es el tipo de lugar donde uno puede beber mojitos o caipiriñas mientras disfruta de una hamburguesa vegetariana, donde el espíritu hippy vive con una mezcla del espíritu de Ibiza y la peculiaridad de las Casbahs marroquíes. En resumen, Tarifa es un cambio de ambiente maravilloso a solo media hora en coche.
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