Los que vivimos en la preciosa zona turística residencial de Sotogrande tenemos una multitud de actividades excitantes que podemos probar durante los meses de verano. Algo que puede que atraiga a las personas ágiles y amantes del mar con un sentido de la aventura es una excursión marítima para que los aficionados puedan observar las ballenas. Con binoculares y un toque de optimismo, miles de entusiastas marinos salen cada verano al Estrecho de Gibraltar en una multitud de embarcaciones para intentar ver a estos escurridizos mamíferos que pueden llegar a medir hasta 24 metros de largo.
Una de las principales razones por las que el Estrecho Gibraltar (que divide el Mediterráneo por el este y el Atlántico por el oeste) es tan popular por el avistamiento de ballenas o los safaris marinos en general, es la gran cantidad de alimentos que encuentran aquí, generados de los nutrientes que arrojan las corrientes que se forman en este estrecho paso entre España y Marruecos.
A través de este estrecho podemos divisar varios tipos de ballenas: Calderón común, Orca, Cachalote, Rorcual aliblanco y Rorcual común. Aunque estos dóciles gigantes de los mares emigran durante todo el año del Océano Atlántico al Mar Mediterráneo y viceversa, se mueven a gran velocidad y pueden mantener la respiración hasta una hora. Por ello, y por el hecho de que es imposible saber cuándo o dónde saldrán a la superficie, son muy difíciles de avistar.
Por tanto, el avistamiento de ballenas suele integrar el avistamiento de delfines, también para aumentar las posibilidades de que la excursión sea un éxito. Aquí en el Estrecho, justo frente a la costa de Sotogrande, pueden observar delfines comunes, listados y mulares. Sin embargo, al contrario de las ballenas, los delfines tienen unos pulmones mucho más pequeños y su comportamiento social les hace pasar más tiempo cerca de la superficie, por lo que son más fáciles de ver.
Las excursiones típicas para ir a ver las ballenas salen de Gibraltar, Tarifa o Algeciras y duran entre dos y cuatro horas.
A bordo, la embarcación está capitaneada por un profesional mientras un experto estará a su disposición para ayudar a los pasajeros a encontrar a estos majestuosos mamíferos.
El avistamiento de ballenas en el extremo sur de Europa es una aventura magnífica y una experiencia que todos deberíamos vivir al menos una vez en la vida.
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